Curioso resulta y maldito debe ser el libro escrito por Curzio Malaparte (pseudónimo de Kurt Erich Suckert) en 1931 y titulado “Técnica del Golpe de Estado” porque a pesar de haber sido obra muy famosa y leída en la primera mitad de los años treinta del siglo pasado y de haber ocasionado a su autor una condena a destierro interno decretado por el régimen fascista italiano, pocas reediciones posteriores se conocen de la misma en Europa.
“Técnica del Golpe de Estado” analiza con precisión los diferentes golpes o intentos de golpes de estado habidos en Europa desde el 18 de Brumario de Napoleón hasta la llamada “Marcha Sobre Roma” de Mussolini constituyendo cada “golpe de estado” un capítulo de la obra. No obstante, “Técnica del Golpe de Estado” no constituye un libro de historia propiamente dicho ni mucho menos un manual de sabotaje, sino que por el contrario es un libro político y sociológico que desmenuza las fuerzas actuantes y las acciones decisivas que existen en todo golpe de estado y que no son precisamente las más visibles ni las más espectaculares.
Malaparte sostiene, y no sin falta de razón, que un golpe de estado solo requiere la participación de “mil técnicos” que actúan bloqueando todas las capacidades del estado al que se golpea y difundiendo noticias no siempre veraces que mantienen en la neutralidad a la mayoría de la población o las hacen aceptar pacíficamente la nueva situación surgida del golpe de estado resultando de este modo que el hecho relevante que la historia marca como el momento cumbre del golpe de estado como fue la disolución de la Asamblea Nacional por Napoleón el 18 de Brumario o la toma del palacio de la Táuride por el Ejercito Rojo durante la Revolución Rusa no fueron nada más que simples concesiones a la estética permitidas por Napoleón y Trosky respectivamente.
Aunque hoy en día, muchos de los que han tenido la suerte de hacerse con algún ejemplar de “Técnica del Golpe de Estado” y de leerlo, sostienen que la obra de Malaparte carece ya de vigencia y que ha sido superada por el tiempo no se puede afirmar fácilmente que tal cosa sea cierta porque siendo la teoría sostenida y esencialmente demostrada en “Técnica del Golpe de Estado” la de que una minoría (“mil técnicos” se denomina a tal minoría en el libro) puede hacerse con el control de todo un estado moderno incluso sin ser detectado el cambio de situación por la mayoría de la población, cabría preguntarse precisamente en el momento presente que si en el pasado inmediato fue posible que “mil técnicos” pudieran hacerse con todo un estado ¿Que podrían hacer hoy diez mil familias económicamente poderosas no con un estado concreto, sino con todo el orbe?.
Un saludo al amigo Chouan. Tus artículos están escogidos con una esquisitez única. Posiblemente en los estados de hoy en el fondo, lo fundamental del poder esté en menos de 1OOO técnicos. Sus movimientos, subidas y caídas en desgracia son, no obstante, mucho más sutiles. Pensad en los Botín, Ibarra, Polanco (qepd)..., alguien se cree que tienen el mismo poder que el ciudadano de la calle que ve "Gran Hermano".
ResponderEliminarEstá claro que eso es así. EL Club Bilderberg con el CFR y la Trilateral, así como con su Instituto Tavuistock de lavado de cerebros, representa una "élite" de pocos miles de hombres poderosos que manipulan a su antojo lo que ocurre en el mundo y en la economía. Queda demostrado, según documenta Daniel Estulin, que la revolución bolchevique de 1917/18 fue puesta en marcha por los Rockefeller y lo que luego se convirtió en CFR, y los gobiernos de EE.UU. están todos bajo el control de esta gente. Con Tavistock manipulan a la gente a través de los grandes medios de comunicación (entre ellos New York Times, CBS, EL País...), y así se aseguran que las masas piensen como ellos quieren y necesitan que piensen. Luego está el tema de las vacunas para conseguir manipular a las mentes químicamente, para lo que se inventan epidemias como la Gripe A. Hoy los golpes de estado son más sutiles, pero muy efectivos.
ResponderEliminarLes cuento que un golpe de estado que ocurrió a la vista de todos, pero los golpistas supieron esconder muy bien. A Fidel Castro lo sacaron del poder a finales de julio del 2006, y todos se tragaron gustosos el cuento de que el tirano se enfermó y por eso cedió voluntariamente todos sus poderes. Los interesados en ver las causas del golpe y como pudo realizarse y esocnderse lo pueden ver en el blog DemocraciaSIGolpeNO.blogspot.com
ResponderEliminarGracias.