El referéndum, ni legal ni vinculante, sobre la independencia de Cataluña celebrado en Arenys de Munt el pasado día 13 de Septiembre del 2009 como colofón de la festividad de la “Diada” no puede considerarse como algo anecdótico o folklórico porque, entre otras cosas, pone de manifiesto que en las últimas décadas se ha fomentado artificialmente en determinadas Comunidades Autónomas, sobre todo por medio del sistema educativo, la creación de un creciente odio a España y un no menos creciente e irrevocable deseo de separación entre las nuevas generaciones de jóvenes nacidas tras la llamada transición democrática.
Sin querer entrar en profundidades, solo indicaremos que a esta lamentable situación se ha llegado a través décadas de falseamiento de la historia que tiene su origen en una interesada e irresponsable manipulación política de determinados grupos y partidos que ha sido respondida y rebatida por el silencio cómplice de academias e instituciones que en el mejor de los casos se limitaban a afirmar que “la unidad de España estaba garantizada por la Constitución”.
No es nuestra intención hacer un erudito texto sobre el origen de la españolidad de la que no puede escapar ningún territorio ni ciudadano ibérico por ser “España” simple degeneración lingüística de la denominación puramente geográfica “Hispania” dada por los romanos a toda la Península Ibérica, pero sí es nuestra intención poner de manifiesto las consecuencias que la ruptura del estado español tendrían para todos y que son ocultadas y minimizadas por los amigos de la secesión, distinguiéndose claramente consecuencias económicas y políticas.
En primer lugar y dentro de las consecuencias económicas, la secesión significaría de forma inmediata para los nuevos territorios independientes la pérdida del mercado interior, que conllevaría la reducción de la inversión extrajera ya que esta invierte en España porque le interesa entrar en un mercado de más de cuarenta millones de consumidores potenciales y no solo en uno de cinco o seis millones. Esta pérdida del mercado interior llevaría igualmente a una crisis económica inmediata y al descenso del nivel de vida. Por otra parte, la independencia produciría en los nuevos estados un incremento del gasto público y el consiguiente endeudamiento y la segura reducción de la inversión pública porque de la noche a la mañana se verían en la necesidad de crear de la nada un ejército, un servicio diplomático, pagar las cuotas de pertenencia a determinadas organizaciones supranacionales e incrementar las fuerzas policiales y la organización judicial, todo ello sin entrar a considerar los problemas sociales que generaría el crear, igualmente de la nada, un sistema de pensiones o la salida inmediata del Sistema Nacional de Transplantes.
Por su parte, el estado que surgiera como heredero del extinto Estado Español, solo se vería afectado de forma significativa en materia de pensiones, pues la Seguridad Social perdería automáticamente millones de cotizantes al mismo tiempo que se vería obligada, en un principio, a seguir satisfaciendo el mismo número de pensiones por lo que el vigente sistema público de pensiones quebraría, aunque siempre se podría crear uno nuevo sacando del mismo a los antiguos pensionistas del quebrado sistema y que fueran ciudadanos de los nuevos estados.
Junto a estas consecuencias económicas que apuntamos aparecerían no menos importantes consecuencias políticas que sin duda también tendrían repercusiones en la economía. Teniendo en cuenta que los nuevos estados que surgieran del proceso de descomposición de España surgirían con claro carácter imperialista (recordemos que tanto el nacionalismo catalán como el vasco mantienen reclamaciones territoriales sobre zonas pertenecientes a otras comunidades autónomas) y que en sus sociedades el sentimiento nacionalista no sería unánime al existir un importante porcentaje de población que se seguiría sintiendo española surgiría la problemática cuestión de “las minorías irredentas” lo que unido a que las fronteras que surgieran serían altamente inestables porque en las proximidades a las mismas existirían no pocas poblaciones que desearían estar al otro lado de esas fronteras tendríamos una situación de inestabilidad política en toda la península ibérica propia de la pasada época de la Reconquista con constantes e innumerables reivindicaciones territoriales de unos sobre otros a las que habría que añadir las que, sin duda, presentarían otros estados extranjeros como podría ser Portugal sobre Olivenza y Marruecos sobre Ceuta, Melilla y las Canarias.
En consecuencia, el proceso de secesión que quieren abrir o justificar irresponsablemente algunos partidos políticos dirigidos por megalómanos personajes y del que el referéndum de Arenys de Munt es solo un botón de muestra no liquidaría tanto un estado jurídicamente constituido o una patria de antigua y noble historia como una “Unión de Convivencia” dentro de la cual, con algún que otro problemilla (sobre todo en estos últimos doscientos años), todos hemos convivido y progresado durante siglos y todo ello para abrir un muy prolongado y peligroso periodo de inestabilidad de consecuencias imprevisibles a mayor gloria y mejor beneficio de ciertos demagogos que deberían ser marginados en sus respectivas sociedades.
Jodé Arturo, calificar como "algún que otro problemilla". a todo lo que ha sucedido y está sucediendo en este país en ese espacio de tiempo es poco menos que supeficial y caree de poco fundamento.
ResponderEliminarEstimado amigo:
ResponderEliminarCiertamente hablo de "problemillas" porque, a pesar de todas las guerras civiles habidas en este periodo de tiempo, al fin y al cabo ya pasaron y los problemas pasados ya dejaron de ser problemas.
De todas formas me preocupan más los problemas presentes y los que el presente nos depara para el futuro.
Salud y Amistad.
Todo depende de las gafas de sol que se lleven y del color de sus lentes. Yo conozco a algún español de origen saharaui que está muy quemado por lo mal que se portó España con aquella PROVINCIA.Y siempre se silencian cosas como la venta de tierra a terceros ó los trueques. Por ejemplo: Francia, en la guerra de la convención invadió Guipúzcoa, y España, años después la intercambió, como si fuera un cromo, por la mitad de la isla de Santo Domingo, lo que es Haití. Por no hablar de Gibraltar....Cosas de los humanos.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarme quito el sombrero ante tú entrada
hay imparcialidad en el texto y saber
eso me gusta
ahora respecto a mi
¡Por Valencia no pasarán!
lo juro por mi sangre y por mi vida
como se les ocurra intentar anexionar La Comunidad Valenciana
saldré a la calle
y mataré Catalanes
he dicho
un saludo
Estimada lectora:
ResponderEliminarEn primer lugar decirle que agradezco su comentario para seguidamente pasar a contestarla.
En relación con el comentario que hace de Guipuzcoa tengo que decirla que durante la Guerra de la Convención (también llamada Guerra Gran y Guerra del Rosellón) Guipuzcoa fue ocupada por las tropas francesas quienes intentaron formar una Junta Independentista para crear un estado independiente bajo protección francesa, pero tal intento fracaso por la negativa de los Guipuzcoanos a independizarse.
El ejército francés abandono Guipuzcoa tras el tratado de Basilea de 1795 en el que España se retiraba del Rosellón y la Cerdaña que había ocupado en la Guerra de la Convención.
Por otra parte es de indicar que en esa misma época los vascos franceses al ver el carácter centralista de la República Francesa solicitaron de las Juntas de Vizcaya y Guipuzcoa que instasen a la Corona Española para unirlas a ella con los mismos derechos y libertades que gozaban los vascos en las Españas, pero tal solicutud fue desatendida por las menciondas juntas.
La Cesión de Haiti a Francia nada tiene que ver con la ocupación de Guipuzcoa ya que Haiti fue cedida a Francia cien años antes por el tratado de Ryswick en 1695 tras ser ocupada por filibusteros franceses.
Gibraltar fue ocupado por fuerzas británicas en nombre de don Carlos de Austria cuyas pretensiones al trono de las Españas era sostenidas durante la Guerra de Sucesión, entre otros, por los Catalanes. Asímismo Gibraltar se cedió a Inglaterra por el tratado de Utrecht en 1713 y el motivo de dicha cesión territorial fue el no ceder los derechos pesqueros de los pescadores vascos en el Golfo de Vizcaya. Junto con Gibraltar también se cedió a Inglaterra, la Florida y Menorca que fueron recuperadas posteriormente... Gibraltar no se pudo recuperar, entre otros motivos porque toda la población española había abandonado la roca y se había transladado creando el pueblo de San Roque.
Por lo que se refiere al Sahara, le dire que yo no estoy nada de acuerdo con lo que se hizo. Si bien es cierto, que siendo el ejército español, la única esperanza que tenía el pueblo saharaui en 1976, no se puede negar que el Polisario actuó torpemente al continuar secuestrando soldados españoles. No obstante el Sahara no debía haberse cedido como se hizo porque era evidente que Marruecos se lo iba a anexionar. Por cierto, que siendo cierto que fue provincia española también es cierto que en 1976 ya no lo era porque la ONU exigió su descolonización, seguramente como maniobra para que terminara siendo territorio marroquí. Ah y otra cosa... España en aquellas fechas no estaba tan sola en su contencioso con Marruecos porque tenía el pleno apoyo de Argelia e incluso de la URSS si hubiera decidido defender el territorio.
Salud y Amistad
Estimado Lector:
ResponderEliminarAgradezco su comentario, pero he de manifestarle mi rotunda disconformidad con lo que dice de que "matará Catalanes". Matándonos entre nosotros, que es lo que parece que quieren algunos, no se soluciona ningún problema.
Me temo, que tendré que hacer algún artículo sobre el carácter que han tenido las guerras civiles en España que desde luego jamás ha sido étnico, aunque parece ser que ahora no pocos políticos estan fometando el odio étnico entre los españoles con cierta aquiescencia de las Instituciones.
Salud y Amistad
hola
ResponderEliminarmire, da igual que intetemos ampliar esta conversación
no me arrepiento de lo que he dicho
creo que hablo por todos los Valencianos
estamos hartos, muy hartos, que no tenemos lengua que es Catalán
que no tenemos tierra que es suya
nosotros contribuimos a España como el primero
y no nos gastamos el dinero en absurdas embajadas
y en equipos de fútbol o hockey
ese dinero es de los Españoles
no para hacer chorradas
así que por favor dejemos este tema que me enerva
hablamos Valencia no Catalán
y no somos los Paises Catalanes
somos la Comunidad Valenciana
un saludo
Sr Chouan: Tiene ud. razón. He sufrido un lápsus de memoria -por hacerlo de memoria- al escribir que se cedió Haití a cambio de Guipúzcoa. Enmiendo mi error al rectificar diciéndo que se cedió la parte española de la isla, actual República Dominicana. Discúlpeme asímismo por mi ligereza a la hora de escribir sin entrar en detalles, siempre me gustó dejar pinceladas para ilustrar los temas de debate. Seré más cuidadosa la próxima vez. Déjeme decirle, señor, que su blog es tremendamente interesante y educativo. Me descubro ante ud.
ResponderEliminarno se te olvide que todavía estamos sufriendo las consecuencias de esos "problemillas"...
ResponderEliminarEstimada lectora Juli Gan.
ResponderEliminarA cambio de Guipuzcoa no se cedió nada, simplemente se hizo a cambio de la retirada de las tropas españolas que habían entrado en el Rosellón al mando del General Ricardos.
Efectivamente, en el tratado de Basilea también se cedía la parte española de la Isla de la Española (actual Rep. Dominicana) pero la de forma inmediata se inicio la resistencia. De todas formas tal cesión solo tuvo por origen un no saber negociar y una mala diplomacia. Hay que recordar que la Guerra de la Convención prácticamente la había ganado España, pero no supo negociar. Años más tarde volvería a ocurrir en el tratado de Viena donde a pesar de dar millones a Tallerand para que trabajara a favor de los interes españoles, no sacamos ningún beneficio de tal tratado.
Por cierto, dato curioso, Cataluña fue anexionada a Francia por Napoleón en 1812 cedida por el nominal rey José I (Pepe Botella), pero los catalanes jamás aceptaron tal anexión.
De todas formas siempre he creido que es mejor mirar hacia adelante y buscar soluciones de futuro que mirar en la historia para sacar argumentos para enfrentarnos.
Agradezco sus elogios, pero no creo merecerlos.
Salud y Amistad
Estimado anónimo:
ResponderEliminarCiertamente de algunos de esos "problemillas" estamos pagando las consecuencias, pero objetivamente con buena voluntad se podrían solucionar y avanzar hacia adelante.
Ahora bien ¿Existe realmente buena voluntad?
Salud y Amistad
Hombre José Jaime ¿por todos los valencianos?
ResponderEliminar"nosotros contribuimos a España como el primero
y no nos gastamos el dinero en absurdas embajadas
y en equipos de fútbol o hockey
ese dinero es de los Españoles
no para hacer chorradas"
Ejem. Mejor no hablamos del derroche de la Generalitat en los últimos años....para que hablar de la F1, La copa América, La ciudad de la Luz, chorradas que estaremos pagando hasta el final de los tiempos...
Hola Arturo!!. El problema central ahora mismo radica en que el Tribunal Constitucional es el organismo que se reserva la decisión de si el Estatut de Catalunya es válido o no segun la actual Constitución, y claro quienes forman dicho tribunal son jueces elegidos por los partidos políticos. Esto no es una democracia, ya que los Jueces no pueden ser elegidos por miembros del gobierno o por los partidos políticos. No es una democracia, porque la decisión de los ciudadanos catalanes con respecto a su Estatut, no ha sido respetada, es más, se amenaza con el Constitucional para recortarlo.
ResponderEliminarYo entiendo el Carlismo, como el intento político de restaurar los Fueros y Usos constitucionales de cada uno de los territorios históricos de las Españas, y por tanto no puede, ni tiene sentido marcar límites o marcos, como el pretendido por la Constitución de 1978, para limitar y cercenar lo que debiera ser desde el principio la Constitución de Catalunya, y así seguidamente las diversas Constituciones de las Españas. Pienso que Don Tomas Caylà Grau dejo bien establecido lo que debiera defender el carlismo en la cuestión Territorial, cuestión que el liberalismo no ha zanjado, porque la dinámica que se ha seguido fue el reconocimiento, en primer lugar de la centralización política, para pasar a ir cediendo competencias del gobierno central a los gobiernos periféricos y autonómicos. Esta deriva, esta forma de funcionar ha hecho que el secesionismo independentista triunfe, porque muchos catalanes aun no sienten que se les consulte, que se les pregunte, que se les informe de las situaciones. Madrid y sus gobiernos, desde el principio hicieron a su antojo, tenían y tienen la costumbre de utilizar los recursos de los demás, sin pedir permiso, cosa que con la antigua Monarquía Española o Hispánica de los Austrias, no ocurría. El Rey de las Españas, preguntaba a Catalunya, consultaba a los Catalanes y estos finalmente decidían ceder parte de sus recursos, si ello fuera necesario para acontecer y llevar a cabo los proyectos de la Monarquía.
Estimado M. Fernández:
ResponderEliminarEn mi opinión la solución constitucional de España sería ir a un "Estado a la Suiza", que asumiera ser una potencia de segunda clase, neutral, altamente descentralizada y que cada estatuto fuera la constitución de cada autonomía y de la suma de todos surgiera una constitucion general.
Todo ello garantizado y protegido por la Corona que debería guardar alguna prerrogativa, ser responsable, ser ejemplar y cuidar de forma efectiva por todos los ciudadanos, especialmente por los desfavorecidos
y aun asi y todo seguirían adelante, mucho me temo, aunque eso suponga que ambas partes quedarían reducidas practicamente a nada
ResponderEliminarsaludos
Esperemos que no y que se imponga el sentido común y la buena fe en la convivencia futura sobre el egoísmo de algunos caciques metidos a políticos.
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