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lunes, 7 de junio de 2021

PASE FORAL

Estos últimos días hemos sido testigos por los medios de comunicación, de la Negativa del Gobierno Vasco de aceptar los planes del Gobierno Central para la desescalada de las restricciones impuestas por la pandemia.

            A pesar de pertenecer al Partido Político de Pedro Sánchez, los miembros del gobierno Vasco del P.S.O.E. , han dado su conformidad a la postura tomada por su Gobierno.

            Esta situación y este hecho, hoy día anómalo, de que un socio del Gobierno Central, como es el P.N.V. haya tomado la decisión de no cumplir la normativa impuesta por el gobierno Central, sin duda creará distintas y opuestas opiniones, unas contrarias y otras favorables a la decisión tomada por el Ejecutivo de Vitoria. Personalmente me posiciono a favor de la postura adoptada.

            Algunos que lean estas líneas, no comprenderán acaso, que un carlista, como es notorio que lo soy, y que tantos artículos ha publicado en defensa del carlismo y su historia, refrende una decisión política que sin duda ha partido del P.N.V. y consensuada con los miembros socialistas del Ejecutivo.

            Aparte de considerarla beneficiosa para el País Vasco, también tengo mis razones políticas para defenderla.

            Los carlistas, desde hace 188 años, hemos sido sin duda defensores delos Fueros de las Naciones de las Españas. No solo ha sido en el lema tradicional de : “ Dios-Patria-Fueros-Rey”, que continua vigente en nuestros corazones, modernizado en la década de los años sesenta del pasado Siglo por el de : “Socialismo-Federalismo-Autogestión”, que guarda la esencia del Foralismo sin renunciar a un ápice del mismo. Este sentimiento foralista, se ha recogido también por los representantes de la Dinastía carlista, y así Carlos María Isidro, en la primera Guerra carlista envía, fechada el 18 de Marzo de 1834, una carta a Zumalacarregui defendiendo los Fueros. Posteriormente en la tercera Guerra Carlista, Carlos VII, derogaba la Ley de Nueva Planta, y restituye los Fueros a Cataluña, y a los Territorios de la Corona de Aragón, jurando asimismo durante dicha guerra, los Fueros de Vizcaya en la Casa de Juntas de Guernica, y los de Guipúzcoa en la Parroquia de Santa María de Villafranca de Ordicia. Práctica seguida por sus sucesores, ya que Don Javier, Jura en la clandestinidad los Fueros de Vizcaya haciéndolo extensivo a todos los de las Españas, en Junio de 1951 ante el Arbol de Guernica. Su nieto, Don Carlos Javier, en fechas más recientes, en marzo del 2012 en el Monasterio de Irache, juró los Fueros de Navarra en castellano y Euskera, y el 1 de diciembre del 2019, en la Capilla del Santo Cáliz de la Catedral de Valencia, juró los Fueros del Reino de Valencia, en valenciano.

            Ambas partes, ante esta postura, han manifestados que tienen elementos para defender cada una de ellas su decisión, y por ello se puede  generar un debate político y legal. Sobre el debate político, cada parte tiene sus argumentos, lo mismo que sobre la pertinencia legal de las decisiones tomadas. Ahora bien, en este momento en que se está invocando constantemente a la Constitución, parece que a muchos se le olvida lo que la misma señala en su Disposición Adicional Primera,  que textualmente dice : “ La Constitución ampara y respeta los derechos históricos delos territorios forales.  La actualización general de dicho régimen foral se llevará a cabo, en su caso, en el marco dela Constitución y de los Estatutos de Autonomía”

En este caso, el Gobierno Central, ni ha respetado ni ha amparado los derechos Forales, y ni en el marco de la Constitución se ha llevado a cabo su actualización. Esto recuerdo lo prometido en el Convenio de Vergara de 1839, cuando se pactó entre el Gobierno y el General Maroto, que los Fueros serían respetados, y una vez acalladas las armas, se procedió a vaciarlos de contenido.

            Entonces, no se conocían movimientos separatistas, estos vinieron años más tarde, como reacción al creciente centralismo del Gobierno de Madrid, pero los mismos diputados liberales vascos, que eran fueristas, defendieron en las Cortes de Madrid los Fueros Vascongados y de Navarra, y los carlistas enemigos tradicionales de estos Diputados, estaban de acuerdo con lo que defendían. Posteriormente vinieron alianzas entre carlistas y nacionalistas, en defensa de los Fueros, y llegaron en las primeras elecciones de la Segunda República en llevar una candidatura conjunta, de la que fue portavoz el carlista Don Joaquín Beunza, ( que fue fusilado por milicianos en el Fuerte de Guadalupe de Hondarribia el 5 de Septiembre de 1936 ) .Otros han dicho que los acuerdos también se dieron en tiempo dela Guerra Civil, como el Pacto de San Juan de Luz, que llegado a conocimiento de Franco, reaccionó con el Decreto de la Unificación y el bombardeo de Guernica  ( prueba documental de este acuerdo no lo he encontrado por ninguna parte, y había llegado a la conclusión de que se trataba de una leyenda, una vez estando con José María Zavala, que era entonces Secretario General del Partido Carlista, le pregunté si había existido o era solamente una leyenda, y me contestó que había sido cierto ).

            Cuando en la Constitución se reconoce los derechos históricos de los territorios forales, es legítimo y lógico cuando se actúa en beneficio de toda la sociedad residente en los mismos, que se apliquen los principios Forales, y si están reconocidos los pertinentes en el Estatuto mejor, y si no lo están, por aplicación de la mencionada disposición adicional, actuar como lo ordenan los derechos históricos : se obedece pero no se cumple, como determina el Pase Foral, cumpliéndose lo ordenado por las autoridades de los Territorios Históricos, y no haciéndolo con lo dispuesto por la Autoridad Central. Derecho histórico que durante siglos se ha aplicado.

            No olvidemos, que la unión delos territorios históricos, especialmente de Guipúzcoa, a la Corona de Castilla, era un contrato sinalagmático de “dot ut des”, y en este caso Guipúzcoa se comprometía a ser leal a la Corona, y ésta a respetar y a defender la Provincia, y prueba de que la Provincia fue Leal, está en el escudo de la misma desde 1599,en que se le concedió  llevar laleyenda : “Fidelisima Vardulia numquam superata”, y que recientemente fue borrado.

 Juan José Garay

 


1 comentario:

  1. Tampoco nos pongamos mucho de acuerdo con los que ponen el busto de Sabino en el Batzoki.

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