Páginas

miércoles, 21 de abril de 2021

EL FIN DE LA ILUSION

Con motivo de las próximas elecciones autonómicas madrileñas no dejan de aparecer sondeos electorales sobre  la intención de voto en unas hipotéticas elecciones generales y, por supuesto, sobre los posibles resultado de los comicios autonómicos del 4 de mayo en Madrid.

            Todos estos sondeos y encuestas, además de indicar que el Partido Popular crece ostensiblemente en intención de voto, marcan una tendencia generalizada que parece pasar desapercibida cual es el lento, pero progresivo, retorno al bipartidismo tras seis años de resultados electorales que fructificaban en un parlamento extremadamente fragmentado. Tal vez el bipartidismo al que se vuelva no sea tan perfecto como el que existió entre 1982 y 2015  existiendo ciertas minorías parlamentarias, pero tales minorías estarán constituidas principalmente por grupos nacionalistas periféricos y grupos residuales que se situarán más en la izquierda que en la derecha.

            Ahora bien ¿A qué responde este reagrupamiento del electorado en torno a los dos históricos partidos de la transición cuando el bipartidismo se daba por definitivamente finiquitado?. La respuesta no puede ser más sencilla y lógica: tal cosa responde a la DESILUSIÓN.

            Los nuevos partidos que, aparentemente, rompieron el bipartidismo se presentaron como alternativas novedosas para el cambio, contra un sistema que daba claros síntomas de corrupción y generaba un galopante retroceso social, pero seis años después, ¡Ahí los tenemos!: pactando con lo viejo y asumiendo los sempiternos vicios de la decadente casta política. Emergieron contra "la casta" y en casta se han terminado convirtiendo.

            Tres fueron los partidos que intentaron, y casi lograron (aunque les faltó el casi), romper el bipartidismo: "Ciudadanos", VOX  y PODEMOS.

            "Ciudadanos" que pretendía regenerar la política moviéndose en tierra de nadie acercándose en unos casos al Partido Popular y, en otros, al Partido Socialista en lo que algunos denominaban con humor "el baile de la Yenka" (por lo "derecha, derecha, izquierda, izquierda"....) ha sido descuartizado por éstos y prácticamente tiende a desparecer en silencio asistiendo muchos de sus cuadros en la actualidad a una búsqueda desesperada de acomodo entre los partidos mayoritarios con tal de seguir de algún forma en la cresta de la ola política.

Por su parte, VOX ha reproducido un esquema ideológico híbrido, en la que la esencia estúpida de la extinta Alianza Popular se mezcla con algunos elementos nostálgicos de la no menos extinta Fuerza Nueva, con un resultado que se encuentra entre lo cómico y lo patético al poderse escuchar a sus líderes defender la sacrosanta Constitución de 1978 al mismo tiempo que despotrican contra el estado autonómico que ésta consagra en su Título VIII y todo ello en los foros que ofrecen cualquiera de las numerosas campañas electorales autonómicas a las que alegremente concurren con tal de no perderse ninguna porción del pastel que constituye el poder y el público presupuesto.

            Por lo que se refiere a PODEMOS, formación política ubicada en la zona geográfica de la izquierda y que realmente era el único de los nuevos partidos que hablaba u ofrecía un cambio sustancial en el estado de cosas que padece el pueblo español, ha incurrido en todos los mismos defectos a los que pretendía enfrentarse para ponerlos fin. Atacó al Partido Socialista como uno de los partidos del régimen político a cuyos dirigentes acusaba de formar parte de la casta política y, tras provocar la repetición innecesaria de dos elecciones generales, terminó pactando, en enero de 2020, con el Partido Socialista la formación de un gobierno de amplia mayoría que, en más de un año, ha sido incapaz de derogar la llamada Ley Mordaza y la Reforma Laboral aprobada por el anterior gobierno del Partido Popular y, aunque como proyecto estrella, ha logrado el establecimiento del Ingreso Mínimo Vital (IMV), el mismo no ha dejado de ser un brindis al sol por el mínimo número de familias que tienen o pueden tener acceso al mismo. Tanto en el Parlamento como en el Gobierno, PODEMOS, ha incurrido en tan graves y manifiestas contradicciones como su antagonista VOX pues, por ejemplo, proclamándose republicano no solo no ha llevado al Gobierno a dar pasos hacia una reforma constitucional en ese sentido sino que en los actos de juramento de sus cargos no han tenido problema alguno de repetir la manida fórmula de "Cumplir fielmente las obligaciones del cargo con... lealtad al Rey" olvidándose por completo de una de sus reivindicaciones estelares que era la de promover un "proceso constituyente".

            Los nuevos partidos emergentes y sus dirigentes, bien por pura incompetencia o con clara intencionalidad, han incurrido exactamente en los mismos vicios que los viejos partidos decadentes convirtiéndose en flores de un solo día. Poco a poco irán desapareciendo al ser absorbidos o reabsorbidos por los viejos partidos quedando como fuerzas residuales en el arco parlamentario y no habrán servido nada más que para matar las ilusiones y esperanzas de todo un pueblo durante otros cuarenta años y para que resurja de nuevo el bipartidismo, en no más tiempo que el que tarden en celebrarse las dos próximas elecciones generales, con los dos partidos mayoritarios posiblemente más radicalizados.

 

 

jueves, 15 de abril de 2021

DON JAIME DE BORBÓN PARMA NOMBRADO ENVIADO ESPECIAL PARA EL CLIMA


             Con motivo del nombramiento de S.A.R. Don Jaime de Borbón Parma como Enviado Especial para el Clima por el Gobierno Holandés, la Asociación 16 de abril ha remitido la nota de prensa que a continuación reproducimos íntegramente.

 

 

            "JAIME DE BORBÓN PARMA, de nacionalidad española y holandesa, Duque de San Jaime y Conde de Bardi, tercero en la línea de sucesión de la Dinastía Carlista y miembro de la Familia Real Holandesa, ha sido recientemente nombrado Enviado Especial para el Clima por el Gobierno Holandés. Este nuevo destino, consistente en liderar a nivel internacional la diplomacia climática, comenzará el próximo agosto.

            JAIME DE BORBÓN PARMA, de formación diplomática, adscrito al cuerpo diplomático holandés, trabaja actualmente como representante de dicho gobierno ante el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Anteriormente ha ocupado diversos cargos diplomáticos, entre ellos la Embajada ante la Santa Sede en la Ciudad del Vaticano, así como la responsabilidad como Enviado Especial para los Recursos Naturales.

            JAIME DE BORBÓN PARMA es licenciado en Relaciones Internacionales por la Universidad de Brown y obtuvo su maestría en Economía Internacional y Gestión de Conflictos internacionales en la Universidad John Hopkins.

 

13 de abril de 2021

 

Asociación 16 de Abril 

comunicación@asociacion16abril.org"

lunes, 12 de abril de 2021

HOY COMO AYER

Hace ya mucho tiempo que empezamos a considerar la posibilidad de que España no tenga Historia, porque la Historia siempre está constituida por acontecimientos y hechos del pasado, pero en este pobre país nuestro es como si el pasado siempre fuera presente no existiendo prácticamente nada en el ayer que no se reproduzca en el hoy. 

            Esto viene a cuento por la polémica que se ha desatado esta última semana a consecuencia de la vacuna contra el COVID19 fabricada por los laboratorios AstraZeneca, la cual parece que da ciertos efectos secundarios adversos, incluso con resultado de muerte. En realidad este debate que se ha suscitado resulta absurdo hasta más no poder pues evidentemente desde que se inventaron las vacunas, la vacunación ha evitado muchísimas muertes y han sido notablemente beneficiosas para la humanidad; no obstante, a la hora de elegir la vacuna para hacer frente a una enfermedad los criterios son elementales: si solo existe una vacuna, esa es la que hay que poner, pero si existen varias, como es el caso actual frente al Coronavirus, hay que poner la que mayor protección dé y la que menos efectos secundarios graves provoque.  Por tanto, si suponemos que la vacuna de AstraZeneca tiene una protección del 92 por ciento y produce efectos secundarios en un 0,005 por ciento de los casos y otra de las vacunas tiene el mismo porcentaje de protección pero un 0,004 por ciento de efectos secundarios, la solución resulta más que obvia: dejar de vacunar con AstraZeneca y vacunar con esa otra vacuna lo que, evidentemente, se puede hacer sin graves problemas salvo que existan intereses no declarados al haber apostado por la vacuna de un laboratorio en concreto.

            De hecho, toda la actual discusión sobre el tipo de vacuna a utilizar recuerda lo trágicamente acontecido a principios de los años sesenta del pasado siglo con la vacuna contra el virus de la Poliomielitis. En 1960 había dos vacunas contra la Poliomielitis: la vacuna del doctor Salk que era inyectable y la del doctor Sabin que era oral, ambas daban una protección frente a la polio por encima del noventa por ciento aunque la protección ofrecida por la vacuna de Salk  (99 %) era ligeramente superior a la ofrecida por la vacuna de Sabin (95%). Pues bien, mientras que el Seguro Obligatorio de Empleados (SOE) controlado por la Falange apostó por la vacuna de Salk la Dirección General de Sanidad (DGS) controlada por el Ejército apostó por la de  Sabin que fue la que terminó siendo aprobada y utilizada en nuestro país hasta que en los años ochenta, finalmente, la vacuna de Salk contra la Poliomielitis se terminó imponiendo en España. El problema es que mientras duró la discusión en la que posiblemente influyeran los precios de una y otra vacuna y algún que otro interés (o comisión) oculto; en nuestro país contrajeron el virus de la Polio unos treinta mil niños que de haberse aplicado desde un primer momento el único criterio que se puede tener en consideración cuando se trata de la salud y que es el criterio médico-sanitario, y no el político y/o económico, no se habrían contagiado y no estarían sufriendo hoy en día las consecuencias de aquella pésima gestión política de una crisis sanitaria.

             A diferencia de lo que pasaba en los años sesenta del Siglo XX cuando solo existían dos vacunas contra el virus de la Poliomielitis, hoy existen tres vacunas contra el Coronavirus y en los próximos meses, o incluso semanas, existirán más por lo que ¿Por qué empecinarse en vacunar con una vacuna que tiene similar porcentaje de protección contra el virus que las otras pero tiene mayor porcentaje de posibilidades de generar efectos secundarios?, ¿Existe un compromiso contractual para comprar un número determinado de vacunas de la farmacéutica AstraZeneca aunque cuando se adquirió tal compromiso no se hubieran testado suficientemente?, ¿Es la más barata?, ¿Existen intereses políticos ocultos?... En cualquier caso toda consideración que no sea sanitaria cede ante la salud, la vida y la integridad física de los ciudadanos porque la vacuna AstraZeneca no es la única y existiendo vacunas que generan menos efectos secundarios y similar protección esas son las que hay que adquirir y poner a los ciudadanos al utilizarse el único criterio que puede tomarse en consideración ante una epidemia que es el criterio médico y no el político y/o económico.

 

jueves, 8 de abril de 2021

LA EXPLOTACIÓN DEL MIEDO

Convocadas las elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid e iniciada la precampaña electoral ya podemos vislumbrar cual va a ser el discurso del que se servirán los candidatos de los diferentes partidos para conseguir ganar las elecciones del 4 de mayo próximo, llamando extraordinariamente la atención que, a pesar de todas sus diferencias, el discurso sea único y que consista en una apelación al miedo.

            Evidentemente la sociedad española en general y la madrileña en particular se encuentra extremada y peligrosamente bipolarizada y no hay recurso más fácil, simple y sociológicamente eficaz para una propaganda política carente de argumentos y  propuestas realistas que apelar a los sentimientos y el miedo es, ante todo, un estado sentimental.

            Cuando empiece la campaña electoral, y ya lo estamos viendo en la precampaña, veremos a los líderes políticos apelar a lemas ya empleados en otras épocas e ideados por otras personas que, además de poner de manifiesto su falta de originalidad y su recurso al burdo plagio, lo único que conseguirán será generar más tensiones en la política española y enfrentar a la sociedad española.

            Así, la candidata del Partido Popular a la Presidencia de la Comunidad Autónoma, nada más conocer la concurrencia a las elecciones del líder de PODEMOS, Pablo Iglesias, manifestó que tal vez cambiaría su lema electoral por el de "Comunismo o Libertad", slogan inventado en los años cincuenta en los Estados Unidos del Mcarthismo y ampliamente difundido por  "Radio Europa Libre", emisora creada por la C.I.A. para difundir propaganda entre los países del bloque soviético y que tuvo la indecencia de anunciar ayudas y apoyos occidentales a la revolución húngara de 1956 mientras que los húngaros morían en la esperanza de recibir una ayuda que no llegaría jamás.

            Por su parte, Pablo Iglesias, el líder nacional de PODEMOS que ha abandonado la Vicepresidencia Tercera del Gobierno para presentarse a las elecciones madrileñas, ha repetido el viejo lema del Madrid de 1936, "Madrid será la tumba del fascismo",  que a su vez fue tomado de un viejo dicho popular de la época de la Batalla de Somosierra de 1808 que rezaba "Madrid será la tumba del francés", para intentar movilizar a los votantes de izquierda contra la, según él, amenaza de triunfo fascista que supondría un gobierno del Partido Popular con o sin el apoyo de VOX.

            Así pues, el debate parece centrado, absurdamente centrado, en un enfrentamiento Comunismo/Fascismo en el que aquel que no forme parte del considerado "bloque comunista", será un fascista y viceversa, aquel que no forme parte del "bloque fascista" será un comunista. Pero lo grave de  todo esto no es ya que los políticos se encarguen de echar gasolina al fuego, tensando una cuerda que cada vez es más probable que termine rompiéndose e intenten explotar el miedo al otro para arañar votos. Lo más grave de todo esto es que si lo único  peligroso que existe en Madrid y en todo el país son los comunistas y los fascistas la pandemia que ha segado la vida a más de cien mil españoles no es peligrosa, salvo que algún lumbreras de la casta política, y no sería de extrañar que surgiera, conceda al virus del COVID19 algún tipo de carnet político y, por supuesto ante el peligro, todo pierde importancia y, por tanto, el desempleo, la falta de vivienda social, la pobreza creciente y los demás problemas que afectan a los madrileños no son importantes.

            El miedo en política no es una opción ni debe considerarse una propuesta, porque el miedo no construye, todo lo más sirve para movilizar a una parte de la población contra la otra por lo que el miedo es la semilla de la que, con el tiempo, termina germinando el odio. Tal vez por eso, por carecer de ideas constructivas y por no tener nada que decir, en este pobre y maltratado país, se recurre constantemente por parte de la casta política y de sus respectivos palmeros mediáticos al tema de la guerra civil porque hasta para crear miedos los miembros de la casta política muestran una total falta de ideas teniendo que recurrir a los terrores de sus abuelos y bisabuelos.