Si bien es cierto que en numerosas ocasiones hemos echado en falta, desde estas páginas, la publicación en castellano de obras literarias que recogieran otra visión diferente de la Revolución Francesa y de sus consecuencias, hoy tenemos que reseñar la publicación por la editorial Gaudete de “Una Familia de Bandidos en 1763” de Jean Charruau.
“Una Familia de Bandidos en 1763”, que tiene el subtítulo de “Memorias de una Abuela”, recoge las memorias que Marie de Saint Hermine escribió exclusivamente dirigidas a sus dos nietos con una clara intención pedagógica y didáctica. Estas memorias fueron conservadas, recopiladas y finalmente publicadas en Francia por primera vez a finales del Siglo XIX por el padre Jesuita Jean Charruau, cuando al parecer ya no quedaban descendientes directos de la familia protagonista, constituyendo desde su primera edición un importante éxito editorial publicándose todavía hoy prácticamente una nueva edición cada año en Francia.
La obra recoge la historia de la familia Serant y describe muy pormenorizadamente como era la vida rural en la Vendee antes del terror y en los primeros momentos de la Revolución Francesa, dando a conocer como fue una sucesión de provocaciones, tal vez muy bien meditadas, las que produjeron el levantamiento popular de todos aquellos campesinos que terminarían constituyendo el “Ejército Católico y Real”. Así en “Una Familia de Bandidos en 1763” se narra como el asesinato del rey Luís XVI y la expulsión de los sacerdotes que no aceptaron la constitución civil del clero se considero por parte de los campesinos católicos una muy grave provocación de la Convención pero no fue respondida nada más que con la negativa a asistir a los actos convocados por el sacerdote impuesto en la parroquia por la autoridad civil y con la organización en lo más profundo de los bosques de misas clandestinas impartidas por sacerdotes no juramentados que eran perseguidos por las autoridades y escondidos por los campesinos. La última provocación, la gota que colma el baso y que da lugar a la insurrección popular de Vendee y Bretaña fue la “Leva de trescientos mil hombres” ordenada por el gobierno revolucionario, que hizo que los campesinos cogieran sus escopetas y sus güadañas y fueran a buscar a los nobles rurales para que se pusieran a su frente dirigiendo el gran ejército popular que fue el “Ejército Católico y Real”.
Igualmente “Una Familia de Bandidos en 1763” da cumplida cuenta de los medios criminales empleados por los que decían desear la Libertad, Igualdad y Fraternidad para acabar con la resistencia popular mencionando la utilización de los primeros instrumentos de asesinato masivos que conoce la historia y que se forjaron a la luz de las ideas revolucionarias, cuales fueron los barcos con válvulas pensados para ahogar a cientos de personas en los ríos.
La edición de “Una Familia de Bandidos en 1763” que presenta por primera vez en España la editorial Gaudete ofrece una magnífica traducción de la obra que hace que su lectura no sea difícil además de resultar muy amena por el estilo empleado por la autora que hace que se lea con la rapidez y el disfrute con el que se lee una novela de aventuras a pesar de tratarse de unas memorias de relevancia histórica sin igual. Tan solo una queja se puede dar sobre la edición y es la traducción del nombre propio del autor, “Jean”, que aparece como “Juan” ya que consideramos que los nombres propios no deben traducirse jamás. Salvo esta insignificante objeción aplaudimos la publicación en España de esta obra y recomendamos a todos su lectura.
“Una Familia de Bandidos en 1763”, que tiene el subtítulo de “Memorias de una Abuela”, recoge las memorias que Marie de Saint Hermine escribió exclusivamente dirigidas a sus dos nietos con una clara intención pedagógica y didáctica. Estas memorias fueron conservadas, recopiladas y finalmente publicadas en Francia por primera vez a finales del Siglo XIX por el padre Jesuita Jean Charruau, cuando al parecer ya no quedaban descendientes directos de la familia protagonista, constituyendo desde su primera edición un importante éxito editorial publicándose todavía hoy prácticamente una nueva edición cada año en Francia.
La obra recoge la historia de la familia Serant y describe muy pormenorizadamente como era la vida rural en la Vendee antes del terror y en los primeros momentos de la Revolución Francesa, dando a conocer como fue una sucesión de provocaciones, tal vez muy bien meditadas, las que produjeron el levantamiento popular de todos aquellos campesinos que terminarían constituyendo el “Ejército Católico y Real”. Así en “Una Familia de Bandidos en 1763” se narra como el asesinato del rey Luís XVI y la expulsión de los sacerdotes que no aceptaron la constitución civil del clero se considero por parte de los campesinos católicos una muy grave provocación de la Convención pero no fue respondida nada más que con la negativa a asistir a los actos convocados por el sacerdote impuesto en la parroquia por la autoridad civil y con la organización en lo más profundo de los bosques de misas clandestinas impartidas por sacerdotes no juramentados que eran perseguidos por las autoridades y escondidos por los campesinos. La última provocación, la gota que colma el baso y que da lugar a la insurrección popular de Vendee y Bretaña fue la “Leva de trescientos mil hombres” ordenada por el gobierno revolucionario, que hizo que los campesinos cogieran sus escopetas y sus güadañas y fueran a buscar a los nobles rurales para que se pusieran a su frente dirigiendo el gran ejército popular que fue el “Ejército Católico y Real”.
Igualmente “Una Familia de Bandidos en 1763” da cumplida cuenta de los medios criminales empleados por los que decían desear la Libertad, Igualdad y Fraternidad para acabar con la resistencia popular mencionando la utilización de los primeros instrumentos de asesinato masivos que conoce la historia y que se forjaron a la luz de las ideas revolucionarias, cuales fueron los barcos con válvulas pensados para ahogar a cientos de personas en los ríos.
La edición de “Una Familia de Bandidos en 1763” que presenta por primera vez en España la editorial Gaudete ofrece una magnífica traducción de la obra que hace que su lectura no sea difícil además de resultar muy amena por el estilo empleado por la autora que hace que se lea con la rapidez y el disfrute con el que se lee una novela de aventuras a pesar de tratarse de unas memorias de relevancia histórica sin igual. Tan solo una queja se puede dar sobre la edición y es la traducción del nombre propio del autor, “Jean”, que aparece como “Juan” ya que consideramos que los nombres propios no deben traducirse jamás. Salvo esta insignificante objeción aplaudimos la publicación en España de esta obra y recomendamos a todos su lectura.
3 comentarios:
Hola Arturo, Tienes un premio en mi blog, por favor pasa a recojerlo. Un fuerte abrazo
Hola! Yo este libro lo leí en mi lejana adolescencia en castellano. Desconozco si era una edición española o latinoamericana, pero el libro seguro que está en casa de mi padre, así que publicado por primera vez, no sé, pero vendido en España, no lo sería por primera vez.
Hola me podrías mandar si no es mucho esfuerzo un resumen del libro para me examen a mi correo ?? jmariafzerolo@gmail.com
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