En el mundo literario resulta muy común que existan autores que pasen desapercibidos o que sean considerados de segunda fila a pesar de haber marcado un antes y un después en la historia de los movimientos literarios hasta el punto de convertirse en precursores de nuevas formas artísticas o, incluso, de una forma de entender la vida. Tal es el caso de Joris-Karl Huysmans cuya obra “Allá Lejos” (“Lá-Bas”) es la segunda de este autor que reseñamos en este blog.
Joris-Karl Huysmans, adscrito originariamente al naturalismo rompe con dicho movimiento literario a raíz de la publicación de su novela “A Contrapelo” ("A Rebours"), considerada como la obra precursora del decadentismo y del dandismo, para iniciar una evolución personal y artística hacia cierta espiritualidad que desembocaría en su conversión al catolicismo plasmada en su obra “En Camino”.
Es dentro de esta evolución espiritual de Huysmans donde se ha de enmarcar esta novela que titulada “Allá Lejos” ya manifiesta en su propio titulo el interés de autor por traspasar el estudio de los aspectos materiales y más negativos de la sociedad para interesarse por las variables espirituales del ser humano.
En “Allá Lejos”, publicada en 1891 y cuyo primer capítulo constituye una demoledora crítica al Naturalismo; Huysmans se sirve del protagonista, Durtal, quien se encuentra escribiendo una biografía de Gilles de Rais (posiblemente el primer asesino en serie de la historia), para adentrarse en las corrientes subterráneas de demonólogos, misas negras y posesiones que abundaban en la Edad Media y que, para sorpresa del propio protagonista, persisten en la Francia de finales del Siglo XIX.
No obstante, los lectores de “Allá Lejos” no deben esperar encontrarse con una novela de terror porque sobre todo es una obra críptica en la que existe una velada crítica a la Iglesia Católica del “aggiornamiento” con la III República Francesa y en la que Huysmans, que proviene del ateísmo más militante, empieza a explicar las malas acciones de los hombres como una manifestación del poder y de la influencia de las tinieblas. En este sentido, “Allá Lejos” posee la originalidad, al tratar el tema de la influencia de los poderes malignos en los hombres, de hacerles que se manifiesten en éstos a través de la “tentación” y de la “obsesión”, huyendo de la facilidad que resultaría para el autor centrarse en la “posesión” renunciando a la espectacularidad que ello hubiera proporcionado a esta novela.
“Allá Lejos” de Huysmans, constituye también una novela histórica y biográfica porque a lo largo de sus páginas existen extensas digresiones, perfectamente encajadas en la totalidad que constituye la obra, que se ocupan de la vida del Mariscal Gilles de Rais dando a conocer los aspectos más relevantes de este personaje histórico que pasó de ser uno de los “Compañeros de Juana de Arco” a ser condenado a muerte por la comisión de numerosos y abominables crímenes.
En definitiva, “Allá Lejos” es una novela que puede llegar a apasionar al lector y que sin ningún género de dudas merece ser leída junto con “A Contrapelo” y “En Camino” por mostrar las tres juntas la evolución personal y literaria de un escritor, Joris-Karl Huysmans, poco conocido en nuestro país y de una enorme importancia en la literatura universal.
Joris-Karl Huysmans, adscrito originariamente al naturalismo rompe con dicho movimiento literario a raíz de la publicación de su novela “A Contrapelo” ("A Rebours"), considerada como la obra precursora del decadentismo y del dandismo, para iniciar una evolución personal y artística hacia cierta espiritualidad que desembocaría en su conversión al catolicismo plasmada en su obra “En Camino”.
Es dentro de esta evolución espiritual de Huysmans donde se ha de enmarcar esta novela que titulada “Allá Lejos” ya manifiesta en su propio titulo el interés de autor por traspasar el estudio de los aspectos materiales y más negativos de la sociedad para interesarse por las variables espirituales del ser humano.
En “Allá Lejos”, publicada en 1891 y cuyo primer capítulo constituye una demoledora crítica al Naturalismo; Huysmans se sirve del protagonista, Durtal, quien se encuentra escribiendo una biografía de Gilles de Rais (posiblemente el primer asesino en serie de la historia), para adentrarse en las corrientes subterráneas de demonólogos, misas negras y posesiones que abundaban en la Edad Media y que, para sorpresa del propio protagonista, persisten en la Francia de finales del Siglo XIX.
No obstante, los lectores de “Allá Lejos” no deben esperar encontrarse con una novela de terror porque sobre todo es una obra críptica en la que existe una velada crítica a la Iglesia Católica del “aggiornamiento” con la III República Francesa y en la que Huysmans, que proviene del ateísmo más militante, empieza a explicar las malas acciones de los hombres como una manifestación del poder y de la influencia de las tinieblas. En este sentido, “Allá Lejos” posee la originalidad, al tratar el tema de la influencia de los poderes malignos en los hombres, de hacerles que se manifiesten en éstos a través de la “tentación” y de la “obsesión”, huyendo de la facilidad que resultaría para el autor centrarse en la “posesión” renunciando a la espectacularidad que ello hubiera proporcionado a esta novela.
“Allá Lejos” de Huysmans, constituye también una novela histórica y biográfica porque a lo largo de sus páginas existen extensas digresiones, perfectamente encajadas en la totalidad que constituye la obra, que se ocupan de la vida del Mariscal Gilles de Rais dando a conocer los aspectos más relevantes de este personaje histórico que pasó de ser uno de los “Compañeros de Juana de Arco” a ser condenado a muerte por la comisión de numerosos y abominables crímenes.
En definitiva, “Allá Lejos” es una novela que puede llegar a apasionar al lector y que sin ningún género de dudas merece ser leída junto con “A Contrapelo” y “En Camino” por mostrar las tres juntas la evolución personal y literaria de un escritor, Joris-Karl Huysmans, poco conocido en nuestro país y de una enorme importancia en la literatura universal.
4 comentarios:
Pues tiene buena pinta. Tomo nota.
Saludos.
León Bloy detestaba a Huysmans. Es la única razón por la que aún no me he animado. Tal vez sea hora de formar una opinión fundada.
Estimado amigo:
Que un autor deteste a otro no constituye óbice para no leerlo. Por otra parte Huysmans al convertirse al catolicismo lo hace a un catolicismo muy espiritual y contemplativo por su parte León Bloy siempre fue un católico muy militante en la defensa de los derechos sociales de los más desfavorecidos (solo con leer "La Mujer Pobre" se demuestra esto), es decir, un católico más social y más con los pies en la tierra.
Salud y amistad
justo que Ud mencionaba al Naturalismo, recibí un texto que vale el trabajo leer. Me disculpará que le ponga el link aquí. http://notemamos.blogspot.com/2010/11/el-verismo-del-padre-javier-bocci.html
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