CONTACTO (indicando como asunto El Chouan Ibérico): arturoen@hotmail.com

jueves, 30 de agosto de 2018

ODIO E IGNORANCIA



 Aproximadamente desde el mes de abril del presente año 2018 se vienen colocando en espacios públicos de diversas ciudades y poblaciones de nuestra geografía varios modelos de pegatinas informativas sobre el Carlismo y sus propuestas políticas, así como reivindicativas ante la situación social que padece nuestro país.

            Los voluntariosos y esforzados militantes que se dedican a tal actividad corren el riesgo de ser increpados, e incluso atacados, por intolerantes que desean imponer sus formas, sus ideas y sus modos y también se arriesgan a ser identificados y multados por agentes de la policía en aplicación de la llamada Ley Mordaza, pudiéndose afirmar que ya uno de ellosfue multado hace unos años al pago de trescientos euros de multa aunque graciasa la interposición de un hábil recurso quedó exonerado de tal sanción.

            Por ello, las instrucciones que se reciben son claras: ser precavidos, no caer en provocaciones, no entablar discusión alguna y si la policía solicita la identificación, proceder a identificarse y dar cuenta de inmediato a la asesoría jurídica con la que cuentan a fin de que se recurra la sanción que se les pretenda imponer por unas autoridades cada vez más ilegítimas y arbitrarias.

            La tarea de hacer lo que en el mundo de la publicidad se llama "propaganda directa", es muy ingrata pues se sabe y se asume que las pegatinas, y también los carteles, tienen siempre un periodo breve de durabilidad, aunque en el caso concreto al que ahora nos referimos parece ser que las pegatinas que se están distribuyendo se tardan más en pegar que en desaparecer.

            La desaparición de un medio de "propaganda directa" como es la pegatina puede deberse a varios motivos pero todos ellos se pueden identificar. Puede ocurrir que un coleccionista la vea y desee añadirla a su colección, en ese caso intentará despegar la pegatina cuidadosamente tirando de una esquina y abandonando tal acción en cuanto se rasgue lo más mínimo quedando la misma mínimamente dañada pero reconocible y legible. También puede pasar que los servicios municipales de limpieza en el desarrollo de sus loables labores limpien la zona en cuyo caso la pegatina desaparecerá por completo señalando la zona como ideal para reponerla de pegatinas ya que los servicios de limpieza no volverán a dicha zona durante un tiempo suficiente para que la "propaganda directa" cumpla la función que tenga que cumplir. Finalmente, existe el motivo exclusivo del odio de los intolerantes o de los que solo son tolerantes consigo mismos, en ese caso la pegatina queda ilegible y es dañada de tal modo que parece un cuerpo desgarrado tras un ataque de grandes mamíferos rabiosos; el autor, es evidente, desea dejar clara su intencionalidad.

 Pues bien, hemos sabido que, desde que empezó la campaña de colocación de las pegatinas en abril, las mismas son atacadas con una fiereza que a más de uno de nuestros militantes le ha resultado, como poco, alucinante.  Atendiendo al estado en que quedan las pegatinas al poco de ser colocadas, tal agresividad solo se puede achacar al más puro y radical odio que siempre suele ser fruto de la peor de las ignorancias que no es aquella del que no sabe sino aquella que procede de aquel que no tiene interés por informarse y conocer y que permanece fiel a sus prejuicios. Como se puede observar, ya que se adjuntan al presente artículo, las pegatinas en cuestión no atacan a nadie, sino que simplemente plantean la existencia de ciertos prejuicios y denuncian una situación social que es más que posible que se produzca percibiéndose realmente de unos años a esta parte como es un retroceso en la situación social que va a hacer que las futuras generaciones vivan peor que las presentes por lo que no creo que ningún ciudadano de a pie pueda sentirse ofendido por el contenido de dichas pegatinas.

            No importa si se colocan en los barrios más modestos de tradición "izquierdista" o en los barrios altos de gran componente "conservador" pues parece ser que a todos ofenden despertando gran fiereza destructiva, lo cual indica que si a el discurso que contiene no gustan ni a las denominadas "derechas" ni a las llamadas "izquierdas" es que el discurso que contienen debe dar en el clavo y ser el correcto.

            Esto que venimos padeciendo desde el mes de abril es, evidentemente en mucho menor escala, similar o incluso idéntico a lo que pasa en Cataluña (1) con el tema de los lazos amarillos y los lazos bicolores: reflejo de una bipolarización y radicalización político-social que hace vislumbrar en la próxima lejanía una tragedia de no reconducirse la situación por los caminos de la cordura y el sentido común.

           











(1) Donde, al parecer, más se respetan las pegatinas que se vienen colocando desde abril es en Cataluña, tal vez porque estén demasiado ocupados en el tema de los lazos, y en Euskalherria.  
   

1 comentario:

Maricin dijo...

Quizás se respetan en Catalunya y euskadi por que la gente, en general, está mejor educada para respetar las opiniones de otros.

Seguidores

contador de visitas blogger

-0-0-0-0- Carlistes de Catalunya -0-0-0-

Archivo del blog

CARLISMO DIGITAL